Me carga septiembre, no solo por tener que mamarse el chobinismo manoseado de cuanto personaje publico decora los medios, si no tambien del chileno medio que celebra su patriotismo imbecil embriagandose y luciendo sus parrillas y capacidad de endeudarse para comprar dos kilos de vaca muerta por persona en su familia.
En septiembre, todos recuerdan que por casualidad son chilenos, y les molesta tanto que se embriagan para olvidarlo.
Las Fiestas Patrias son una excusa para emborrachase, si al final, ¿a quien le gusta ser chileno?
martes, 11 de diciembre de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario